Apropiación cultural
La apropiación cultural es un tema que en los últimos años se ha estado escuchando y debatiendo, pero, ¿qué es, y cómo se puede evitar? Pues es la adopción de elementos culturales como si fueran propios, y sin pertenecer a esa cultura, y sin consentimiento de la misma.
Seguramente has visto algunas noticias de diseñadores o grandes marcas que utilizan alguna técnica artesanal ancestral, o copian algún diseño y lo venden sin dar crédito y sin consentimiento de la cultura afectada, y aunque han sucedido en distintas partes del mundo, estos son algunos ejemplos más conocidos que han afectado a culturas mexicanas:
El sonado caso de la diseñadora francesa Isabel Marant, que en el 2015 presentó un atuendo con el diseño y el estampado con bastante semejanza a la vestimenta tradicional de la comunidad de Santa María Tlahuitoltepec, en Oaxaca, México, que cuesta alrededor de $300 MXN, cuando la túnica de Isabel Marant se vendía en $4500 MXN aprox.
Otro de los casos es el de Carolina herrera, que su colección Resort 2020 da un aire a algunos elementos de distintos pueblos originarios de México, como los bordados Tenango de la comunidad de Hidalgo, otros parecidos a los que hacen en la región del istmo de Tehuantepec en Oaxaca y también el conocido sarape de Saltillo, en Coahuila. La marca fue acusada de apropiación, a lo que la marca contestó que era un homenaje a la riqueza cultural mexicana.
Y como estos, hay muchos otros casos, y lo más triste de todo es que muchas veces las culturas afectadas no reciben retribución económica por el uso de sus elementos tradicionales, ni dan su consentimiento para el uso de estos, así que tratemos de tomar conciencia y fijémonos más en lo que consumimos, ya que inconscientemente podemos estar impactando indirectamente al robo de propiedad intelectual de estas culturas que a fin de cuentas son nuestras raíces y lo que mayormente nos representa como mexicanos.
Concluyendo, recuerda que, si un diseñador quiera tomar inspiración o utilizar alguno de los elementos culturales, lo mejor es que:
- Cuenten con el consentimiento de la cultura.
- Den crédito a la cultura.
- Reciban retribución económica.